LA VOZ DEL INTERIOR
CÓRDOBA VIERNES 28 DE DICIEMBRE DE 2007
SOCIEDAD
CIUDAD DE CÓRDOBA
Se vive el diciembre más seco en 5 años
Antes de la lluvia de anoche, sólo habían caído 12,8 mm, menos de la décima parte de la media para ese mes
Aún con la torrencial lluvia que se precipitó anoche sobre la ciudad de Córdoba- y otros lugares de la provincia-, este diciembre es, al menos hasta ayer, el mes más seco en la ciudad de Córdoba en comparación con el mismo período de los últimos años.
En general, las precipitaciones medias de este período alcanzan los 150 milímetros. Sin embargo, este mes contabilizaban hasta ayer, solo 12,8 milímetros. Este dato confirma la sensible falta de agua que sufre la provincia con un panorama similar, aunque anoche llovía torrencialmente en Traslasierra.
La ciudad de Córdoba, por el momento, no padece cortes muy severos del suministro. Sin embargo, el director del portal Infoclima, Carlos Eschoyez, considera que “la situación puede ser grave durante el verano”, ya que no se pronostican lluvias que aporten agua a los afluentes.
La sequía que se registra desde hace meses está relacionada con el fenómeno de “La Niña”, que se produce cada 4 a 7 años. Coinciden los meteorólogos. Durante este evento natural, en la zona sur de Sudamérica se produce una disminución de las precipitaciones. En este caso las áreas afectadas por la falta de lluvias son el centro y el este de Argentina, Uruguay, el sur de Brasil y Paraguay. En nuestro país, las precipitaciones se han reducido, inclusive, en la región litoral, zona que se caracteriza por lluvias copiosas.
Las precipitaciones que se registraron en Córdoba en diciembre en los últimos cinco años demuestran la difícil situación que se atraviesa en el mes en curso.
Así, en diciembre de 2002 cayeron 90 milímetros, mientras que en el mismo período de 2003 los pluviómetros acusaron 113 milímetros; en 2004, 182 milímetros; en 2005, 120 milímetros y el año pasado, 148 milímetros.
Al observar las cifras se ve con claridad la situación difícil que atraviesa la provincia.
En lo que va del último mes de este año, cayeron apenas 12,8 milímetros, 133,4 milímetros por debajo de la media anual.
Espejos bajos
Esta situación se ve reflejada con claridad en el nivel de los embalses provinciales.
Las dos fuentes principales de abastecimiento de agua potable de la ciudad de Córdoba, los lagos San Roque y Los Molinos, se encuentran 5,38 metros y 5,73 metros por debajo de la cota máxima de cada uno, respectivamente. El embalse del río Tercero, el lago artificial más grande de la provincia, está 4,5 metros por debajo de su capacidad.
La situación es particularmente crítica en Traslasierra. El dique La Viña, cuya cota máxima es de 10,5 metros, actualmente está en los 79,80 metros, es decir, casi 21 metros por debajo del nivel que tiene cuando está lleno.
También es preocupante la situación en el noroeste provincial, debido a que el dique de Cruz del Eje está ocho metros por debajo de su capacidad de embalse.
La Dirección Provincial de Agua y Saneamiento (Dipas), si bien dice que la situación aún no es crítica, advierte que podría agravarse seriamente si en los próximos días no precipita una buena cantidad de agua en la Altas Cumbres y el cordón serrano para que se recuperen las cuencas hídricas.
Los más castigados
La falta de precipitaciones afecta principalmente la región agrícola provincial, provocando el deterioro de las cosechas, aunque también aumenta el riesgo de incendios y alerta con respecto al abastecimiento de agua a las principales ciudades y a los centros turísticos más demandados durante el verano.
Con respecto a 2007. Eschoyez considera que “es un año que podría considerarse más seco de lo normal”.
En los últimos tiempos debido al proceso de calentamiento global que sufre el planeta, el promedio de lluvias anuales ha aumentado, llegando en Argentina a sobrepasar los 800 milímetros. Sin embargo, la medía que se registró en 2007 no supera los 640 milímetros, mucho menos que el promedio anual que es de 780 milímetros.
Ésta es otra consecuencia provocada por “la Niña”, definida por el Servicio Meteorológico Nacional como una2interacción océano – atmósfera que se caracteriza por la aparición de temperaturas oceánicas superficiales inusualmente bajas en el centro y este del Océano Pacífico ecuatorial.”
Otras consecuencias del fenómeno que se registran en América son: el aumento de las precipitaciones en el noreste del continente americano y el incremento de las lluvias en la región del altiplano y noroeste argentino.
Eschoyez es pesimista a la hora de dar pronósticos que anuncien lluvia para los próximos meses, y considera que los municipios deberían comenzar a tomar previsiones desde ahora para mantener controlada la situación.
LLUVIA EN LAS ALTAS CUMBRES
Anoche se registraba una lluvia torrencial en las Altas Cumbres, con 130 milímetros caídos. Esto provocó inconvenientes como el corte de la ruta de las Altas Cumbres a la altura de San Antonio de Arredondo. El arroyo de Las Jarillas creció siete metros y fueron evacuadas dos familias. Se esperaba la crecida del río San Antonio.-
INFORME DE LA UNC
Evaluar, planificar y monitorear
Según Centro de Relevamiento y Evaluación de Recursos Agrícolas y Naturales (Crean), de la facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNC, las escasas lluvias registradas en las últimas semanas en el centro y norte de Córdoba están reflejadas en índices que indican la ocurrencia de sequías severas. Estas sequías están asociadas con la presencia del evento”La Niña”.
El Crean (en Internet, www.creanorg.ar) recuerda la importancia de disponer de un sistema de monitoreo, evaluación y pronóstico a nivel provincial.).
RECOMENDACIONES
COMO CUIDAR EL AGUA
Ducha. Usar ducha antes que bañera. Se pueden ahorrar entre 90 y 100 litros.
Al enjabonarse. Cerrar la canilla del agua cuando se enjabone. Así se ahorran entre 10 y 12 litros.
Aseo bucal. Cerrar la canilla cuando se lave los dientes.
Manos limpias. Poner tapón en el lavatorio cuando se lave las manos. Supone un ahorro de unos 10 litros.
Mochilas. Reducir la capacidad de las mochilas de inodoros que suelen tener hasta 20 litros. Una descarga de seis litros es suficiente para cumplir eficientemente la función.
Lavarropas. Evitar el uso de lavavajilla o activarlo únicamente cuando esté repleto. Igual para el uso del lavarropas.
Platos. Si se lava los platos a mano, hacerlo sin dejar la canilla abierta y utilizando un tapón para el resumidero.
Auto, al lavadero. No lavar el auto todas las semanas
Plantas. Parquizar los jardines con especies mediterráneas porque consumen menos aguas y son más resistentes.
EL DERROCHE QUE NO APRECIAMOS
Cuando se habla de uso racional de agua, esto no se refiere sólo a la mayor cantidad y la necesaria, sino también a las pérdidas en las instalaciones domiciliarias.
Una canilla: que gotea puede perder en
1 hora: 4 litros
1 día: 96 litros
1 mes: 2880 litros
1 año: 34.560 litros
Un baño de inmersión: 350 litros
Lavar la vereda: Con manguera durante 10 minutos representa 40 litros de pérdida.
Lavar la ropa: Por cada 10 kilos en un lavarropas automático se gastan 140 litros.
Al lavar platos o verduras: pueden perderse 100 litros.
El riego: de una calle de tierra o el de parques y jardines de manera descontrolada representa el mayor derroche de agua.
Depósito: ( o descarga de inodoro) Puede consumir por descarga hasta 20 litros. Pero si la válvula no cierra bien y deja correr el agua, derrocha hasta 150 litros por día.
Cepillado de dientes. Si durante el cepillado dejamos la canilla abierta, pueden perderse 20 litros.
Una ducha: de 15 minutos insume 60 litros.
Hay preocupación en el sector rural.
La falta de lluvias impidió completar aún la siembra de soja. El maíz está complicado.
ESPECIAL
Tancacha. Al menos hasta ayer, el agua se hacía rogar en Tercero Arriba y en una amplia zona del interior cordobés.
En las últimas semanas, las nubes se presentan por un momento, dejan escuchar algunos truenos y descargan muy pocos milímetros. Pero el volumen de agua está lejos del que necesitan los cultivos para su desarrollo.
Días atrás, hasta se invitó a rezar el Rosario, una tarde en Río Tercero , para pedir por la lluvia. Ocurre que este mes de diciembre, por lo menos es gran parte de la zona, no se presentó como otros, cuando los pluviómetros marcban generosos milimetrajes. Históricamente, el último mes del año se ha caracterizado en esta región por buenas lluvias. Pero en 2007 el agua ha esquivado diciembre.
“Seguimos esperando, porque las lluvias que llegaron no fueron suficientes”, señaló Héctor Ester, responsable de la Agencia Zonal Tancacha de la Secretaría de Agricultura de la Provincia.
La soja, principal cultivo regional, hasta el momento cubre 200 mil hectáreas de esta región, mientras las otras 150 mil que se estima cubrirá la oleaginosa, esperan más agua para poder ser sembradas. Mientras, esa ya sembrada espera agua para subsistir y crecer. “Queda una margen”, dijo Ester, aunque aclaró que acotado.
El cultivo más complicado es el maíz, que está “al límite”.
Maíz y Soja
De las 60 mil hectáreas que se estima fueron sembradas este año con maíz en la región, un 60 por ciento está muy comprometido por la sequía. “Nació bien, pero la posterior falta de agua, algunas heladas y las temperaturas muy bajas complicaron su desarrollo”, indicó Ester. “Podríamos decir que el maíz se encuentra al límite, casi sin margen, por la falta de lluvias”, agregó.
La soja sembrada, en tanto, si bien está sufriendo el estrés hídrico, aún está a tiempo de recuperarse. “Si llueve bien en estos días se recuperará sin problemas, pero se necesita una precipitación importante”, indicó Ester. De las 360 mil hectáreas que se suelen sembrar con soja en los últimos años en Tercero Arriba y parte de los departamentos Calamuchita, Santa María y Río Cuarto que representan esta región agropecuaria, se sembraron 200 mil. El resto espera una lluvia que debiera caer al menos unos 40 milímetros, que carguen los perfiles de humedad del suelo.
En este diciembre, las precipitaciones han oscilado apenas entre los 10 y 20 milímetros en esta región, pero además con temperaturas elevadas y la vaporización con el viento que no permite que la mínima humedad pueda mantenerse.
De todas maneras, el sector agrícola regional tienen una noticia alentadora: el trigo cosechado marcó un rendimiento casi histórico para esta zona.
“desde 1975 que no se daba una cosecha como la de este año”, indicó Ester.
Una década de marcas irregulares
En la última década, el registro anual de lluvias en la ciudad de Córdoba asienta marcas irregulares, que van desde una magra de 605,1 milímetros en 2004 (unos 175 milímetros menos que el promedio anaul, que es de 779 milímetros) a otra de 1.287 milímetros en 1999, el año más lluvioso del período tomado como referencia.
Desde 1997, en cinco ocasiones las precipitaciones acumuladas fueron inferiores a la media anual: en 2004, 605,1 milímetros; en 2002, 661,8 milímetros; en 1998, 664 milímetros; en 2006, 743,6 milímetros, y en 2001, 773,7.
En la otra mitad, las marcas superaron los promedios del año. Así, en 2005 cayeron 804,6 milímetros de lluvia; en 1997, 896 milímetros; en 2000, 954,3 milímetros; en 2003, 963,5 milímetros y la marca record de 1.285 milímetros en 1999.
Cabe acotar que el promedio de 779 milímetros que se aplica en la actualidad como referencia corresponde a la década 1990-2000.
CÓRDOBA VIERNES 28 DE DICIEMBRE DE 2007
SOCIEDAD
CIUDAD DE CÓRDOBA
Se vive el diciembre más seco en 5 años
Antes de la lluvia de anoche, sólo habían caído 12,8 mm, menos de la décima parte de la media para ese mes
Aún con la torrencial lluvia que se precipitó anoche sobre la ciudad de Córdoba- y otros lugares de la provincia-, este diciembre es, al menos hasta ayer, el mes más seco en la ciudad de Córdoba en comparación con el mismo período de los últimos años.
En general, las precipitaciones medias de este período alcanzan los 150 milímetros. Sin embargo, este mes contabilizaban hasta ayer, solo 12,8 milímetros. Este dato confirma la sensible falta de agua que sufre la provincia con un panorama similar, aunque anoche llovía torrencialmente en Traslasierra.
La ciudad de Córdoba, por el momento, no padece cortes muy severos del suministro. Sin embargo, el director del portal Infoclima, Carlos Eschoyez, considera que “la situación puede ser grave durante el verano”, ya que no se pronostican lluvias que aporten agua a los afluentes.
La sequía que se registra desde hace meses está relacionada con el fenómeno de “La Niña”, que se produce cada 4 a 7 años. Coinciden los meteorólogos. Durante este evento natural, en la zona sur de Sudamérica se produce una disminución de las precipitaciones. En este caso las áreas afectadas por la falta de lluvias son el centro y el este de Argentina, Uruguay, el sur de Brasil y Paraguay. En nuestro país, las precipitaciones se han reducido, inclusive, en la región litoral, zona que se caracteriza por lluvias copiosas.
Las precipitaciones que se registraron en Córdoba en diciembre en los últimos cinco años demuestran la difícil situación que se atraviesa en el mes en curso.
Así, en diciembre de 2002 cayeron 90 milímetros, mientras que en el mismo período de 2003 los pluviómetros acusaron 113 milímetros; en 2004, 182 milímetros; en 2005, 120 milímetros y el año pasado, 148 milímetros.
Al observar las cifras se ve con claridad la situación difícil que atraviesa la provincia.
En lo que va del último mes de este año, cayeron apenas 12,8 milímetros, 133,4 milímetros por debajo de la media anual.
Espejos bajos
Esta situación se ve reflejada con claridad en el nivel de los embalses provinciales.
Las dos fuentes principales de abastecimiento de agua potable de la ciudad de Córdoba, los lagos San Roque y Los Molinos, se encuentran 5,38 metros y 5,73 metros por debajo de la cota máxima de cada uno, respectivamente. El embalse del río Tercero, el lago artificial más grande de la provincia, está 4,5 metros por debajo de su capacidad.
La situación es particularmente crítica en Traslasierra. El dique La Viña, cuya cota máxima es de 10,5 metros, actualmente está en los 79,80 metros, es decir, casi 21 metros por debajo del nivel que tiene cuando está lleno.
También es preocupante la situación en el noroeste provincial, debido a que el dique de Cruz del Eje está ocho metros por debajo de su capacidad de embalse.
La Dirección Provincial de Agua y Saneamiento (Dipas), si bien dice que la situación aún no es crítica, advierte que podría agravarse seriamente si en los próximos días no precipita una buena cantidad de agua en la Altas Cumbres y el cordón serrano para que se recuperen las cuencas hídricas.
Los más castigados
La falta de precipitaciones afecta principalmente la región agrícola provincial, provocando el deterioro de las cosechas, aunque también aumenta el riesgo de incendios y alerta con respecto al abastecimiento de agua a las principales ciudades y a los centros turísticos más demandados durante el verano.
Con respecto a 2007. Eschoyez considera que “es un año que podría considerarse más seco de lo normal”.
En los últimos tiempos debido al proceso de calentamiento global que sufre el planeta, el promedio de lluvias anuales ha aumentado, llegando en Argentina a sobrepasar los 800 milímetros. Sin embargo, la medía que se registró en 2007 no supera los 640 milímetros, mucho menos que el promedio anual que es de 780 milímetros.
Ésta es otra consecuencia provocada por “la Niña”, definida por el Servicio Meteorológico Nacional como una2interacción océano – atmósfera que se caracteriza por la aparición de temperaturas oceánicas superficiales inusualmente bajas en el centro y este del Océano Pacífico ecuatorial.”
Otras consecuencias del fenómeno que se registran en América son: el aumento de las precipitaciones en el noreste del continente americano y el incremento de las lluvias en la región del altiplano y noroeste argentino.
Eschoyez es pesimista a la hora de dar pronósticos que anuncien lluvia para los próximos meses, y considera que los municipios deberían comenzar a tomar previsiones desde ahora para mantener controlada la situación.
LLUVIA EN LAS ALTAS CUMBRES
Anoche se registraba una lluvia torrencial en las Altas Cumbres, con 130 milímetros caídos. Esto provocó inconvenientes como el corte de la ruta de las Altas Cumbres a la altura de San Antonio de Arredondo. El arroyo de Las Jarillas creció siete metros y fueron evacuadas dos familias. Se esperaba la crecida del río San Antonio.-
INFORME DE LA UNC
Evaluar, planificar y monitorear
Según Centro de Relevamiento y Evaluación de Recursos Agrícolas y Naturales (Crean), de la facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNC, las escasas lluvias registradas en las últimas semanas en el centro y norte de Córdoba están reflejadas en índices que indican la ocurrencia de sequías severas. Estas sequías están asociadas con la presencia del evento”La Niña”.
El Crean (en Internet, www.creanorg.ar) recuerda la importancia de disponer de un sistema de monitoreo, evaluación y pronóstico a nivel provincial.).
RECOMENDACIONES
COMO CUIDAR EL AGUA
Ducha. Usar ducha antes que bañera. Se pueden ahorrar entre 90 y 100 litros.
Al enjabonarse. Cerrar la canilla del agua cuando se enjabone. Así se ahorran entre 10 y 12 litros.
Aseo bucal. Cerrar la canilla cuando se lave los dientes.
Manos limpias. Poner tapón en el lavatorio cuando se lave las manos. Supone un ahorro de unos 10 litros.
Mochilas. Reducir la capacidad de las mochilas de inodoros que suelen tener hasta 20 litros. Una descarga de seis litros es suficiente para cumplir eficientemente la función.
Lavarropas. Evitar el uso de lavavajilla o activarlo únicamente cuando esté repleto. Igual para el uso del lavarropas.
Platos. Si se lava los platos a mano, hacerlo sin dejar la canilla abierta y utilizando un tapón para el resumidero.
Auto, al lavadero. No lavar el auto todas las semanas
Plantas. Parquizar los jardines con especies mediterráneas porque consumen menos aguas y son más resistentes.
EL DERROCHE QUE NO APRECIAMOS
Cuando se habla de uso racional de agua, esto no se refiere sólo a la mayor cantidad y la necesaria, sino también a las pérdidas en las instalaciones domiciliarias.
Una canilla: que gotea puede perder en
1 hora: 4 litros
1 día: 96 litros
1 mes: 2880 litros
1 año: 34.560 litros
Un baño de inmersión: 350 litros
Lavar la vereda: Con manguera durante 10 minutos representa 40 litros de pérdida.
Lavar la ropa: Por cada 10 kilos en un lavarropas automático se gastan 140 litros.
Al lavar platos o verduras: pueden perderse 100 litros.
El riego: de una calle de tierra o el de parques y jardines de manera descontrolada representa el mayor derroche de agua.
Depósito: ( o descarga de inodoro) Puede consumir por descarga hasta 20 litros. Pero si la válvula no cierra bien y deja correr el agua, derrocha hasta 150 litros por día.
Cepillado de dientes. Si durante el cepillado dejamos la canilla abierta, pueden perderse 20 litros.
Una ducha: de 15 minutos insume 60 litros.
Hay preocupación en el sector rural.
La falta de lluvias impidió completar aún la siembra de soja. El maíz está complicado.
ESPECIAL
Tancacha. Al menos hasta ayer, el agua se hacía rogar en Tercero Arriba y en una amplia zona del interior cordobés.
En las últimas semanas, las nubes se presentan por un momento, dejan escuchar algunos truenos y descargan muy pocos milímetros. Pero el volumen de agua está lejos del que necesitan los cultivos para su desarrollo.
Días atrás, hasta se invitó a rezar el Rosario, una tarde en Río Tercero , para pedir por la lluvia. Ocurre que este mes de diciembre, por lo menos es gran parte de la zona, no se presentó como otros, cuando los pluviómetros marcban generosos milimetrajes. Históricamente, el último mes del año se ha caracterizado en esta región por buenas lluvias. Pero en 2007 el agua ha esquivado diciembre.
“Seguimos esperando, porque las lluvias que llegaron no fueron suficientes”, señaló Héctor Ester, responsable de la Agencia Zonal Tancacha de la Secretaría de Agricultura de la Provincia.
La soja, principal cultivo regional, hasta el momento cubre 200 mil hectáreas de esta región, mientras las otras 150 mil que se estima cubrirá la oleaginosa, esperan más agua para poder ser sembradas. Mientras, esa ya sembrada espera agua para subsistir y crecer. “Queda una margen”, dijo Ester, aunque aclaró que acotado.
El cultivo más complicado es el maíz, que está “al límite”.
Maíz y Soja
De las 60 mil hectáreas que se estima fueron sembradas este año con maíz en la región, un 60 por ciento está muy comprometido por la sequía. “Nació bien, pero la posterior falta de agua, algunas heladas y las temperaturas muy bajas complicaron su desarrollo”, indicó Ester. “Podríamos decir que el maíz se encuentra al límite, casi sin margen, por la falta de lluvias”, agregó.
La soja sembrada, en tanto, si bien está sufriendo el estrés hídrico, aún está a tiempo de recuperarse. “Si llueve bien en estos días se recuperará sin problemas, pero se necesita una precipitación importante”, indicó Ester. De las 360 mil hectáreas que se suelen sembrar con soja en los últimos años en Tercero Arriba y parte de los departamentos Calamuchita, Santa María y Río Cuarto que representan esta región agropecuaria, se sembraron 200 mil. El resto espera una lluvia que debiera caer al menos unos 40 milímetros, que carguen los perfiles de humedad del suelo.
En este diciembre, las precipitaciones han oscilado apenas entre los 10 y 20 milímetros en esta región, pero además con temperaturas elevadas y la vaporización con el viento que no permite que la mínima humedad pueda mantenerse.
De todas maneras, el sector agrícola regional tienen una noticia alentadora: el trigo cosechado marcó un rendimiento casi histórico para esta zona.
“desde 1975 que no se daba una cosecha como la de este año”, indicó Ester.
Una década de marcas irregulares
En la última década, el registro anual de lluvias en la ciudad de Córdoba asienta marcas irregulares, que van desde una magra de 605,1 milímetros en 2004 (unos 175 milímetros menos que el promedio anaul, que es de 779 milímetros) a otra de 1.287 milímetros en 1999, el año más lluvioso del período tomado como referencia.
Desde 1997, en cinco ocasiones las precipitaciones acumuladas fueron inferiores a la media anual: en 2004, 605,1 milímetros; en 2002, 661,8 milímetros; en 1998, 664 milímetros; en 2006, 743,6 milímetros, y en 2001, 773,7.
En la otra mitad, las marcas superaron los promedios del año. Así, en 2005 cayeron 804,6 milímetros de lluvia; en 1997, 896 milímetros; en 2000, 954,3 milímetros; en 2003, 963,5 milímetros y la marca record de 1.285 milímetros en 1999.
Cabe acotar que el promedio de 779 milímetros que se aplica en la actualidad como referencia corresponde a la década 1990-2000.
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