PESCADO PODRIDO
A veces, lavándonos las manos, nos ensuciamos la conciencia
(Anónimo)
Algo huele mal en el Embalse del Dique San Roque. El pasado lunes 23 de marzo y en los días posteriores, un olor nauseabundo invadía la ciudad de Villa Carlos Paz. ¿Pescado podrido? En el lenguaje periodístico se llama pescado podrido a una noticia falsa, más allá de si el informador actúa de mala fe o la publica conociendo su disfraz pero apeteciendo que el lector la considere verídica; o si el periodista fue engañado por una fuente; o si el periodista, su fuente y su lector han sido engañados por alguien más.
En cualquier caso es pescado podrido. Eso ocurre en el periodismo, ahora vayamos hacia el discurso político, como aquel que proviene de los que administran la cosa pública.Hay muy buenos vendedores de pescado podrido, cuando no lo reparten a manos llenas sin importarles la vergüenza de tal actitud.¡Cuántos medios de comunicación nos llamaron para saber cuál era la causa de la mortandad de peces en el embalse! Y sentimos impotencia, por no poder responder a tales demandas, a sabiendas que la problemática que se presenta en el cuerpo de agua es demasiado compleja para que desde la parcialidad mínima de nuestra visión podamos aventurar un principio de diagnóstico o, por lo menos, algo mínimamente coherente que dé explicación al fenómeno que ocurre con repetición, tanto en el lago como en el curso del río San Antonio y otros.
Inútiles fueron nuestros pedidos para que las autoridades del área de Recursos Hídricos y de Medio Ambiente dieran una explicación al respecto. Nunca respondieron a las denuncias efectuadas a pesar que se les solicitara un informe al respecto. Hasta tuvimos algunas «opiniones extraoficiales» que llegaron a nuestros oídos como que las «Viejas del Agua» (peces que pertenecen a la familia Loricaridae), se morían de síncopes cardíacos durante el invierno. Realmente no hemos dado importancia a tales opiniones, primero porque no venían por escrito, segundo por lo risueño de las versiones, más allá de la calamidad de la mortandad de peces. ¿Sabrán que son indicadores biológicos de que algo está pasando?
Entonces nos preguntamos: ¿A qué le echamos la culpa: a las algas, a sustancias químicas de distintas índoles, a los nutrientes por faltas de cloacas o los que provienen de los desmontes e incendios forestales, al crecimiento demográfico descontrolado, o a otros elementos aún más peligrosos, que nos han llevado a pedir la Banca del Ciudadano por segunda vez? Llámese el ex Yacimiento Uranífero -sin remediar- Los Gigantes que se encuentra en la cabecera de cuenca del lago San Roque. Quedan en el tintero muchas causas posibles (masas o energías) que pueden actuar en forma conjunta, como mezclas, como potenciadores o funcionando con sinergia, dando como resultado algo más grande que la simple suma de éstos.
Cuántas veces hemos dicho, también, que un cuerpo de agua como lo es la Laguna de Mar Chiquita y sus Humedales en el Río Dulce, no puede seccionarse como una res vacuna. El lema de la Convención Ramsar de protección de Humedales durante este año es: «Aguas Arriba, Aguas Abajo; los Humedales nos conectan a todos». Nosotros pertenecemos a ese cuerpo de agua y estamos Aguas Arriba. Más simple, en una de las cabezas del cuerpo. ¡Es tan difícil de entender que formamos parte del todo!
Nos quieren vender pescado podrido, como el del lago. Nos quieren hacer creer que ahora la ciudad de Villa Carlos Paz, no sólo tiene al Cu-Cú, sino también un lago límpido «gracias» a los tan promocionados «Difusores o Aireadores de Fondo». Muletilla tramposa o instrumento demagógico. El problema del lago San Roque y otros embalses no tiene una solución con sólo aplicar únicamente esas tecnologías. Primero, porque se debe contar con un diagnóstico elaborado desde las pluridisciplinas como corresponde a Estudio de Impacto Ambiental-EsIA responsable y profundo, dentro de las tan burladas Evaluaciones de Impacto Ambiental-EIA.
Todo lo dicho es derecho positivo; sin embargo obviado o ignorado, una y otra vez, sin solución de continuidad. Segundo, recién allí se debe buscar la tecnología apropiada a utilizar en el lago y cuáles van a ser las actividades o acciones de protección en la Cuenca Madre y el propio embalse. ¡Visión holística, le llaman! ¡Qué podemos decir… ante tanta ¿«ignorancia», indolencia, irresponsabilidad, «astucia» de política desahuciada, o qué?... Nada.¡A grandes problemas, grandes soluciones! y por supuesto en períodos de tiempo prolongados con atención pluridisciplinaria científica y tecnológica constante.Quién se hace cargo que la Ley Nº 8941 de la Reserva Hídrica Los Gigantes no esté reglamentada. Inútiles han sido los reclamos ante el Poder Ejecutivo provincial. Ya nos resulta cansador, no por nosotros, sino por la gente que observa que siempre estamos machacando sobre el mismo tema.
Ni la Legislatura, ni el Concejo de Representantes a través de sus bancadas oficialistas y oposición han hecho nada de relevancia, que tomara en cuenta la Opinión Pública y que ésta vea cuan gravísimo es el problema que hay que afrontar lo más rápido posible; sin esquivarle y con soluciones coherentes, a sabiendas que no se van alcanzar de un día para el otro.
Desidia que viene de algunas décadas atrás. Vergüenza lo del COHIPRO (Consejo Hídrico Provincial), que nos vino a vender como en subasta de ilusiones, y en el auditorio de la Municipalidad, el «Proyecto de Acueducto/s», que por supuesto (en lo local) con una rapidez espasmódica fue aprobado no hace tiempo en el Concejo de Representantes. Después de esa «presentación en el palacio» bastante acalorada -en cuanto a críticas- por parte de los que estuvimos allí, nos mintieron descaradamente en un programa televisivo local sobre que el COHIPRO se reuniría en junio del año 2007. Pero terminó en el rincón de los organismos declamados y totalmente obsoletos desde sus nacimientos ¿También pescado podrido? ¿Qué de la solicitud de un legislador por Punilla al respecto de que presentara un pedido de informes de por qué no se constituía este organismo según lo que establece su decreto de creación? ¿Silencio, olvido, cosa sin importancia? ¿No es que los del llano no deliberamos ni gobernamos, sino a través de los representantes del pueblo? Más, nos dijeron que desde el llano poco o nada se puede hacer. ¡Entonces zapatero a tus zapatos!
¿No era que la Planta de Costa Azul era para sanear la Cuenca del lago San Roque? Que sepamos, los emprendimientos inmobiliarios a los cuales se va a abastecer de agua y se va a «acopiar» las Aguas Negras, pertenecen a otra cuenca que no es precisamente la del lago. ¿Entonces? ¡Al diablo con los objetivos que se plantearon los constructores del Dique San Roque y todo lo que se predicó respecto al saneamiento integral! ¡Qué esperanza tendremos los que vivimos en las periferias de Villa Carlos Paz de contar con cloacas y así terminar con la contaminación con pozos negros o sangrías. ¿O acaso la ciudad no se da cuenta que es una de las principales responsables del estado en que se encuentra el lago?
Si se llegaran a levantar de sus tumbas aquellos Ingenieros y otros Profesionales de los distintos saberes (CON MAYÚSCULAS) de la Ex Dirección Provincial de Hidráulica, emprenderían a los azotes como lo hizo Jesucristo en el Templo mancillado por los mercaderes. Allí en la DPH se trabajaba en forma multidisciplinaria y hasta tenían la suficiente valentía para oponerse a proyectos que no podían ser viables, aún en dictaduras militares.
¡Cómo no nos va a doler lo que observamos! Si con 20 años recién cumplidos y con nuestro título de Observador Meteorologista (año 1969-1970), recibimos el aval y el visto bueno de un Director de Estudios y Proyectos de la DPH, para instalar una Estación Meteorológica del lado Oeste del Lago, ya que estábamos investigando sobre la evaporación y la gran pérdida que había por este fenómeno en el Embalse. Se cuidaba el embalse y su cuenca ¡Y cómo! ¡Más!... ¿Qué del Instituto Nacional del Agua (INA), Centro de la Región Semiárida (CRSA)? ¿Cuál es la política para este organismo, de sus recursos materiales, sus profesionales, en fin, de su fortalecimiento?
Villa Carlos Paz contaba con la Estación Meteorológica estándar de Costa Azul en las décadas del 60-70, según protocolos específicos. Ya no existe más, y el Proyecto que presentaron los niños de las escuelas, durante el año 2007, para que Villa Carlos Paz contara con una, ¿fue cajoneado en el ex Concejo Deliberante? ¿Cuántas veces hemos repetido lo mismo? ¿No hay nadie que lleve adelante una acción concreta?
Así podríamos sumar muchas otras cosas más a esto que huele mal, como por ejemplo de proyecto/s de «Forestación de un Basural a cielo abierto». ¿Con eso se va a solucionar el también gravísimo problema de Villa Carlos Paz? El impacto ha sido, y es demasiado grande como para solucionarlo con el implante de árboles. ¿No se tiene en cuenta que los árboles también tienen vida y se enferman al igual que las personas? Cortinas de humo. Siempre soluciones facilistas, obviándose lo que prescriben las leyes para cada caso. Mientras tanto se van acumulando venenos, metales pesados, ¿radiactivos?, materiales no degradables a corto plazo, gases, lixiviados, etc. etc..
¿No es necesario ya, en este preciso momento declarar la EVALUACIÓN DE IMPACTO AMBIENTAL? ¡¡¡Noooo..!!! Eso espanta a la gente, al turista. ¿El olor del lago por estos días, qué? Turismo Sustentable… También eso ¡cuántas veces lo hemos escuchado! Declamación vacía de contenido.¡Del ex Yacimiento Uranífero Los Gigantes, ni hablemos! Todo es basura que se esconde debajo de la alfombra, mientras tanto nos ofrecen PESCADO PODRIDO como el que se observó en el río San Antonio, otros cursos de agua y el lago San Roque. ¡Cuántas veces! Y en los próximos tiempos habrá toneladas y toneladas (metáfora) de PESCADO PODRIDO. Si alguien relaciona lo último con las próximas elecciones, corre por cuenta de cada cual que piense de tal forma.
Nosotros ya no queremos ni regalado el PESCADO PODRIDO, preferimos peces vivos en un cuerpo de agua también vivo, ya que eso es la garantía de que nosotros gozaremos de buena salud.¡Cuánta estupidez humana flota en el lago, mezclada con tanta inmundicia suelta! El resultado a la vista y al olfato de los carlospacenses.
Juan Carlos A. Paesani
Ing. Químico
Post Grado Población y Medio Ambiente
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